Villarreal y Atlético de Madrid se enfrentaban con situaciones totalmente distintas en La Liga. Los de Simeone venían de ganar en la última jornada ante el Betis y los de Calleja de perder ante el Espanyol. Más de lo mismo en la clasificación, donde el equipo madrileño marcha en los puestos altos de la tabla, mientras el castellonés en los puestos de abajo.